2 mayo 2016
En otro artículo, hicimos referencia a la importancia de preparar exámenes oficiales para obtener una certificación que avale el nivel de idiomas, sobre todo en los ámbitos académico y laboral. En esta oportunidad, nos referiremos a un examen de inglés que ha ido adquiriendo relevancia en los últimos años: el IELTS.
El IELTS (sigla en inglés de International English Language Testing System) es un examen de origen británico y australiano que, junto con el TOEFL (de origen estadounidense) es uno de los más utilizados para acreditar el nivel de inglés en el ámbito mundial. Se presenta en dos modalidades: Academic (el más extendido) y General Training (más relacionado con el ámbito laboral).
Si bien originalmente el IELTS estaba dirigido a quienes solicitaban una visa para emigrar a ciertos países de habla inglesa o a quienes querían acceder a un curso universitario en esos países, en los últimos años el alcance de esta prueba se ha extendido mucho más y muchas empresas la utilizan como certificación válida del nivel de un trabajador o candidato a un puesto de trabajo. En España, este examen sirve de acreditación del nivel de inglés en diferentes contextos, tales como oposiciones y universidades.
El IELTS presenta algunas ventajas en comparación con otros exámenes oficiales.
En primer lugar, como la mayor parte de los exámenes, el IELTS evalúa las cuatro destrezas (Reading, Witing, Listening y Speaking) pero, a diferencia de otros exámenes más difundidos en nuestro país (como el First Certificate), este examen no se aprueba o suspende, sino que evalúa el nivel de inglés del alumno con una puntuación de 1 a 9 que corresponde a los niveles del Marco Común Europeo (A1 a C2). Esto permite obtener una certificación válida sin tener que escoger un examen de un nivel específico de antemano.
Por otra parte, hay que destacar que este examen ha sido diseñado específicamente para adultos, por lo cual todos los materiales resultan relevantes para los alumnos que aborden su preparación. Por ello, nuevamente, muchos alumnos adultos se ven más motivados a presentarse a este examen que a otros más difundidos, como el ya mencionado First Certificate o el Advanced (CAE).
Como comentamos antes, esta es una prueba de nivel, por lo cual en principio un candidato podría presentarse a la evaluación sin más y obtener un resultado que certificase su nivel actual. De todos modos, como con cualquier examen, conviene hacer una preparación previa para familiarizarse con el formato y la modalidad y desarrollar estrategias que permitan obtener los mejores resultados. Por supuesto, lo ideal es hacer un curso con un profesor especializado, sobre todo para practicar las áreas de Writing (donde se piden textos muy específicos y que pueden resultar complejos, como informes) y de Speaking. También, si hay poca flexibilidad de horarios, se puede preparar el examen haciendo un curso online; lo ideal es complementarlo con un tutor para las áreas de Writing y Speaking.
Una vez tomada la decisión de presentarse, conviene hacer un examen de prueba (mock exam) en condiciones similares a las reales. Esto nos permitirá tener una aproximación al resultado que se obtendrá (por supuesto, en las áreas de Reading y Listening, ya que las de Speaking y Writing requieren la presencia de un profesor).
Si estáis interesados en preparar el IELTS o si queréis más información, ¡no dudéis en contactarnos! Con gusto responderemos vuestras preguntas y os daremos orientación.